“El Mozarteum Argentino es una asociación civil sin fines de lucro, creada en 1952 con el fin de difundir la mejor música clásica en nuestro país.” Así es como se define actualmente esta institución, presidida por Luis Alberto Erize y dirigida por una Comisión Directiva comprometida y pujante. Sin embargo, rápidamente se descubre que sus objetivos van más allá.

El primer objetivo de este grupo de músicos entusiastas se basó en realizar conciertos de música de cámara, orquestal y coral, destinados a difundir la obra de Wolfgang Amadeus Mozart, en especial sus creaciones menos conocidas. La propuesta contemplaba también el estudio de su obra y su divulgación, como así también la edición de partituras y trabajos de investigación afines, todo en suelo argentino.

Románticamente, las primeras cuatro temporadas de la nueva institución se llevaron adelante en las casas de sus miembros. Hogares como los de Jeannette Arata de Erize, quien luego presidiría y sería la cara del Mozarteum durante toda su vida, abrieron sus puertas a músicos y a un número creciente de invitados.

Las actividades del Mozarteum

El Ciclo de Conciertos de Abono en el Teatro Colón es uno de los más reconocidos y prestigiosos de la Institución, con 70 años de historia. Se realiza de abril a noviembre y tiene como finalidad acercar a los más prestigiosos artistas y agrupaciones internacionales de la música y de la danza al público argentino. Cuenta con una programación única por calidad y cantidad, con artistas aclamados en los más importantes escenarios del mundo. Durante 2024 se realizarán siete conciertos para lo más de 1.500 socios, además del público que habitualmente adquiere su entrada por concierto. Es decir, una audiencia mayormente conocedora, habitué, compuesta por abonados de larga data y de transmisión familiar.

Cerca de 300 de esos 1.500 socios son menores de 30 años y socios del programa Música Joven, creado en 1971 con el fin de que los jóvenes puedan tomar contacto con la música clásica. Tiene como fundamenteo promover el carácter eminentemente colectivo de la audición de la música clásica, estimulando a los grupos juveniles a reconocerse como parte de un público más amplio. Además de una búsqueda en la formación del gusto y apreciación de la música y la danza, tiene como finalidad la inclusión y confraternización de los jóvenes con características sociales y/o económicas diversas.

Luego están los célebres Conciertos del Mediodía, que lleva como bandera brindar la posibilidad de que un público cada vez más diverso se acerque a la música clásica. Fue creado en 1959, es único en su género en la Ciudad y ha pasado por muchos espacios, como el Teatro Gran Rex, el CCK y el TGSM. La intención es aprovechar la pausa del mediodía y que un público diverso -grupos escolares, estudiantes, empleados, jubilados, entre otros- tenga la posibilidad e asistir a a conciertos gratuitos. Cada concierto convoca regularmente 600 personas y se han registrado públicos mayores a 2.000. Lleva más de 800 conciertos realizados y para 2024 fueron programados quince.

El Mozarteum Argentino también cuenta con un programa de becas, las cuales otorga desde 1961 y de manera más sistemática a partir de la creación del Fondo de Becas. A lo largo de su historia ha otorgado más de 500 becas, con distitnas finalidades, a quienes reflejan la vida musical de los últimos 60 años de nuestro país.

Los Cursos de Perfeccionamiento buscan contribuir a la formación de los jóvenes y talentosos artistas, dándoles la posibilidad de acceder a cursos breves e intensivos a cargo de reconocidos maestros. Esto es muy valorado por los estudiantes, ya que la mayoría de los cursos se dan en Europa y en los EEUU, mientras que los del Mozarteum Argentino están destinados a jóvenes artistas argentinos y sudamericanos.

Por último, tenemos la célula en el exterior del Mozarteum Argentino, el Atelier, en la Cité Internationale des Arts, en Paris. Aquirida en 1965, este departamento sirve de residencia temporaria -de no más de 60 días- de artistas que deseen perfeccionarse o dar curso a su inspiración creadora en ese ámbito. Este pequeño departamento ha servido de alojamiento a muchos de los mejores creadores del país: músicos, pintores, escultores y escritores.